Para mi tocar y ayudar a las personas es un acto de presencia continuo.
Se que todo es perfecto, ellos están en mi vida para ayudarme a crecer, inmediatamente escucho cuando algo en mi no esta bien , ellos me lo avisan con su sutileza y vibración.
Lo mismo ocurre en terapia individual , a la escucha se claramente donde está el problema, y a través de mi intuición que se desarrolla día a día.
Cuando toco el tambor y canto mis cantos , siento la tierra bajo mis pies , firme , femenina y con toda su fuerza conecto con ella a través de su savia y ahí recibo y doy, comparto, ella con su sabiduría me guía a donde tengo que llegar.
Agradezco a las personas que asisten a mis meditaciones con voluntad y constancia, sin ellos no seria esto posible, y a las que asisten a mis talleres, y ponen plena confianza en mi en la terapia individual.... a todos gracias, gracias, gracias!!!
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